Terreno pantanoso.....

Es la primera vez que me meto aquí en las pantanosas aguas de la política.
Lo primero, para recomendar un libro: "Historia de los totalitarismos", de Hannah Arendt.
Lo segundo, para recomendar un artículo en prensa:



Ahora explico por qué.....

Dice Joaquín Leguina (PSOE), un tipo al que se le pueden achacar muchas cosas pero no que no sea sincero, que el problema de la política española actual es que hay que colocar a muchos, que no tendrían donde caerse muertos si no fuera por un carguito público.
Y tiene más razón que un santo.

Veréis: este verano vino un iluminao de la política de regreso de sus vacaciones de verano, llorando -dice- porque no había podido encontrar en ningún establecimiento en toda Galicia una muñeca que hablara en gallego para sus hijas. Qué delicia! Tener una casta política taaaan sensible.....

Risible, no?

A continuación, como el iluminao era un carguito público, se concedió no sé cuantos miles o millones de euros de subvención a las empresas jugueteras, para que "doblaran" las muñecas al gallego. No de su bolsillo, por supuesto. Sino del vuestro. Del nuestro. Porque para eso están los políticos, no? Para solucionar los problemas de los mortales.

Menos risible, verdad?

Hace poco ha sido el 70 (o era el 75?) aniversario de la llegada de Hitler al poder en Alemania (gracias a unas elecciones democráticas, no lo olvidemos!)
En muchas instituciones se propuso emitir un comunicado de condena, que expresara su rechazo al nazismo y a cuánto éste representa.
Pues el partido político al que pertenece la lumbrera moña al que antes me referí, ha tenido los santos cojones de negarse a firmarlo.
el BNG no ha firmado esa condena, escudándose en que los israelíes hoy oprimen a los palestinos.
Así como suena.

Y eso , ya, no tiene ni puta gracia!

Deberíamos tener más cuidado con todo esto. El hecho de no haber leído un libro de Historia en la vida, el dedicarse a escuchar y repetir eslóganes políticos porque es más cómodo que pensar por nuestra cuenta o el dejarse arrastrar por el primer gilipollas que se envuelve en una bandera puede hacernos derivar a terrenos aún más pantanosos que la política española actual. A justificar un tiro en la nuca o a exterminar al vecino por cualquier pretexto, por ejemplo.


(y ni soy del PP, ni soy nacionalista español, ni he estado demasiado expeditivo con el señor Anxo Quintana, al que deseo que Dios guarde muchos años a pesar de que lo que me pida el cuerpo sea aplicarle una piadosa eutanasia, disecarlo y exponerlo en un museo como curiosidad científica. el museo de Banyoles, por ejemplo!)

"Yo tenía una grrrranja en las colinas del Ndong..." (*)

(* pronúnciese "grrrranja", como "granja" pero con acento danés, como el de Isak Dinesen, por poner un ejemplo)







No me gusta nada esa especie de misticismo que rodea a África. Supongo que será por mala conciencia de ser el continente abandonado, o por simple esnobismo al tratarse de algo exótico. En las películas sólo salen sabanas y puestas de sol maravillosas, pero nunca los suburbios de Johannesbuego, los vertederos de Nairobi o las chabolas de Pretoria.

Lo que ocurre es que, estás allí, y te dejas llevar...... Para chabolas y suburbios, los que tenemos aquí, y además, esto no es un artículo de denuncia social, así que me sumaré también a la exaltación del exotismo, y a las puestas de sol:





Y eso que ahora es la temporada de lluvias, y no ví el cielo despejado en ningún momento.....

Lástima de no tener un poco más de tiempo para malgastar una tarde leyendo en la terraza, con un vinito en la mano, frente a la sabana hasta el horizonte....




Un lodge perdido en el parque Krüger, todos los animales del mundo a tiro del teleobjetivo, y sólo un par de días por delante.....
Eso es algo parecido a ponerte la miel en los labios.

Así que habrá que volver! Cuando tenga tiempo que malgastar en la terraza, alguien que me lleve el trípode, la cuenta corriente algo más saneada, y haya recuperado las ganas de descorchar vino y dejar que se hunda el mundo a mi alrededor...


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(momento cinéfilo demasiado obvio:)

Chicago

Conozco a muchos fanáticos de la ciudad de Nueva York. Incluso yo mismo me cuento entre ellos, para qué nos vamos a engañar...
Pero muchos menos que sean incondicionales de Chicago.
Se explica porque desde este lado del charco es bastante menos conocida, y no aparece en una película de cada dos.
Y mejor así!
Me ahorro tropezarme con japoneses en cada esquina, o parejas de novios de Albacete a la salida de Tiffany´s.Y, qué queréis que os diga: eso le quita bastante glamour...

Pues es algo así como NY, pero más tranquila, menos espídica, más nostálgica (o eso me lo parece)y algo así como"menos obligatoria". Tiene los mismos rincones, pero menos multitud. No me enrollo más:










Aunque en ambos sitios ocurren casualidades, "serendipity", creo que lo llaman...









Un beso

El roast beef (un inciso)

Sí, hablando de todo un poco, no me salió del todo mal, el roast beef! Todo gracias a mi amigo Johnnie, a mi hermana Malena, a cierto saber estar, y a concederme créditos que no debía; a Mascagni y a quien no me olvidó (y a las bicicletas!)

U beso, y feliz año nuevo!

Bien, vale.... (los peligros de la electrónica)

Esto es lo malo de tener un coche que no se termina de entender con el ipod. Que te selecciona las canciones haciendo una lista a su manera, aleatoriamente, o por orden alfabético ( lo juro! a continuación de "Casta diva" de Bellini, me ha puesto "bellotero pop", de Fernando Esteso"!!!). Y no te queda más remedio que entender (por lo menos a los que nos creemos cartesianos), que solemos tender a pensar que las riendas de nuestras vidas obedecen a las mismas reglas que la electrónica. O sea, a ninguna. O, al menos, a ninguna medianamente definida.

Y todo es una mierda pinchada en un palo (perdonadme la expresión, pero no me negaréis que es gráfica!), porque nada es como en las novelas, ni siquiera como en las telenovelas. Porque me muero de ganas de dar un abrazo (y felicitar el año nuevo, qué le vamos a hacer, uno es así de cursi!) a gente que, o no se lo merece, o está lejos!

Y no sólo felicitar el año nuevo, sino invitar a un helado viendo el final de "El Padrino", o apretarme contra su espalda al bajar en trineo la cuesta nevada de Cotos. Incluso dejarle encender mi chimenea, ahora que le vendría bien una limpieza de hollín después de tantos inviernos.

Es lo malo de estar sin fuerzas, y con un teclado a mano, como siempre, en las peores condiciones. O en las más frágiles.

Y no tengo fotos. Ni me apetece buscar canciones. Y más lo siento yo, pero hace un frío que pela! Debe de ser que la calefacción es electrónica también, está compinchada con el ipod, y de un momento a otro me va a empezar a tocar a Ella Fitzgerald.